Urbano de Manchobas
Estudios: Arkitektoa
Urbano Manchobas Careaga (1886-1968)
Urbano Manchobas Careaga nació en Ermua el 7 de agosto de 1886. Sus padres, Lorenzo Manchobas y Salomé Careaga, vivían en el número uno de la calle Artekale y Urbano fue el segundo de seis hermanos. Lorenzo Manchobas trabajaba en Madrid, por lo que la familia iba y venía asiduamente.
En 1903, Urbano Manchobas empezó los estudios de Arquitectura en Madrid, compaginándolo con trabajos de voluntariado en el Cuerpo de Bomberos municipal. Se graduó en 1911 y en 1913 abrió un estudio de arquitectura con el famoso arquitecto Miguel García-Lomas, con el que colaboró en numerosos proyectos, sobre todo en la edificación de casas de indianos en Ribadesella, Asturias.
En 1918, fue nombrado arquitecto oficial de la Hacienda Pública en Madrid y destinado a trabajar al catastro de Valladolid. Antes de finalizar el año pidió una excedencia y volvió a trabajar con García-Lomas en Ribadesella y Madrid. En 1920, ambos arquitectos se involucraron en el proyecto del Hostel Fávila de Covadonga, que sería utilizado como seminario. Trabajaron juntos hasta 1924.
En 1925 se casó con la donostiarra Manolita Egaña, que ejercía como profesora en la escuela rural de Eitzaga. Residieron en Ermua, en la calle Irulitxa y tuvieron tres hijos e hijas.
Entre 1923 y 1935, diseñó varios edificios en Ermua, tales como el Rancho Drogeten (1923), el chalet de su tío Nicolas Careaga (1925) o el Batzoki de Ermua (1935).
En agosto de 1927, se convirtió en el primer arquitecto con plaza del Ayuntamiento de Eibar, donde trabajó hasta bien entrada la Guerra Civil. Fue uno de los protagonistas del crecimiento urbanístico e industrial de Eibar, siendo autor de algunos de los edificios y talleres más emblemáticos de la ciudad.
- Ampliación de la FUNDICIÓN AURRERA (1928)
- SOLAC (1930-1931)
- CRUCELEGI HERMANOS (1930)
- ORMAETXEA (1930-1931)
- ARRIZABALAGA (1931)
- Chalet de Vildosola (1927)
- Chalet de Isasi (1925)
En 1929 llevó a cabo el proyecto de vaciado de aguas sucias y la depuración y el suministro de aguas de la ciudad.
La crisis armera que arrastraba Eibar desde antes de la proclamación de la II. República, no hacía más que aumentar la tasa de desempleo. El entonces alcalde, Alejandro Tellería, diseño un plan especial de obras que dotaría a Eibar de viviendas e infraestructuras necesarias para la población, dando así trabajo a los armeros desempleados. Urbano Manchobas fue el arquitecto que llevó a cabo dicho plan especial, creando así nuevos elementos para la ciudad.
- Nuevas viviendas en O’Donell y Paguei
- Traer agua desde Arrate
- Lavaderos en Txonta y O’Donell
- Escuelas rurales en los barrios de Maltzaga, Santa Kurutze y Aginaga
- Nueva alhondiga
- Nuevo cementerio
- Frontones de Txantxa-zelai y Escuela Armería
- Sanatorio de Tubercolosos Victoria Eugenia
- Quiosco de música de Untzaga.
Como arquitecto municipal, tuvo que supervisar los daños ocasionados por los bombardeos de numerosos edificios públicos vascos durante la Guerra Civil. Participó en el desmontaje del viaducto de Ormaiztegi, con la finalidad de impedir el paso de las tropas franquistas y ello lo llevó a ser perseguido y condenado a pena de muerte. Manchobas consiguió escapar, primero a Santander y luego a Ambere, pasando por Ziburu para reunirse con su familia. En Amberes, trabajó como funcionario de la delegación del Gobierno Vasco.
En 1939, unos días antes del comienzo de la II. Guerra Mundial y con tres penas de muerte sobre él, Manchobas huyó a Venezuela. Su familia no se reunió con el hasta pasados diez años.
En Venezuela, trabajó en la empresa Construcciones Paul y durante la década de los cincuenta, diseño numerosos edificios de estilo modernista y neovasco, algunos de ellos catalogados desde 2005 como Bien de Interés Cultural. Siguió diseñando y proyectando hasta bien entrada la vejez y en 1961, contando con 75 años, vio finalizadas las obras de la iglesia Santa María de Coromoto que diseñó en 1949.
Fue un gran amigo de Toribio Etxeberría, exiliado también en Venezuela. Aunque muy opuestos ideológicamente, uno nacionalista y creyente y el otro ateo y socialista republicano, los dos compartían un idioma común y la añoranza a su tierra. Manchobas siempre quiso volver a Euskal Herria y aunque en la década de los sesenta lo intentó, no puedo hacerlo ya que el castigo judicial contra él seguía en pie.
Murió en Caracas el 26 de abril de 1968 tras una caída y las posteriores complicaciones quirúrgicas. Está enterrado en el Panteón de los Vascos.
Edificios de Eibar
Hermanos Crucelegui S.A.
JARDIÑETA - IBARGAIN
Escuela de Santa Kurutz
Gorosta bailara