Barrena-32

Edificio industrial, (cat) 1948 (Raimundo Alberdi Abaunz )
Barrena 32

Descripción

Este edificio es un ejemplo de construcción mixta, es decir, mezcla de edificio industrial y residencial. Fue construida por Manuel Retolaza y el objetivo ere maximizar el volumen construido para obtener la mayor rentabilidad para la venta o alquiler de talleres y viviendas. La parte industrial fue utilizada por diferentes empresas.

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La mezcla de industria y vivienda en el mismo edificio es una característica diferenciadora del patrimonio industrial de Eibar, aunque siempre hay un uso que predomina sobre el otro. Sin embargo, en este edificio encontramos esta proporción al 50 %.

Podemos considerar esta construcción como el edificio mixto por antonomasia, compuesto por la adición de dos bloques de viviendas sobre un bloque industrial; una solución insólita.

El edificio se construye en 1947 por Manuel Retolaza, industrial local, cuyo objetivo fue maximizar el volumen construido para obtener la mayor rentabilidad para la venta o alquiler de los talleres y las viviendas. También su hijo, José Retolaza, promovió la construcción de edificios.

En este edificio se generó un ecosistema formado por el Bar Donosti en planta baja, talleres en las cuatro primeras plantas donde trabajaron empresas como ciclos Gamma (bicicletas), Silca (cinturones para el seiscientos…), mecanizados DEJ… y 12 viviendas en las plantas superiores.

Actualmente han desaparecido las empresas de las plantas industriales y dos de ellas fueron reconvertidas para albergar viviendas, mientras que en la planta baja existe una tienda de venta y reparación de bicicletas.


Síntesis documental

El edificio fue promovido por Manuel Retolaza, industrial de Eibar que invirtió en su construcción para destinarlo a alquiler y venta de talleres y viviendas. El proyecto original del edificio queda recogido en el archivo de obras de 1947 6866.56.

 

Se ubica en la zona denominada como Ondamendi, en frente de la fábrica de Ayra Durex; hoy en día responde a la C/ Barrena nº32. En el año 1947 esta zona se encontraba escasamente construida con edificios bastante bajos alrededor. La zona se caracterizaba por la presencia de los talleres Hijos de A.Gabilondo y Ayra Durex, extensas fábricas que se construyeron sobre el cauce del río, aunque no eran especialmente altos.

 

Este nuevo edificio, en cambio, alcanza los 20m en la fachada principal, y llega a ser de mayor altura en su parte posterior. A su lado se encontraba en el momento de la construcción, un pequeño taller de planta baja más una planta piso (Rodisa) con el que haría medianera, y un chalet al otro lado.

 

El proyecto fue redactado por el arquitecto Raimundo Alberdi, quien proyectó una cantidad importante de edificios en la ciudad. Su diseño responde a una tipología singular que combina de forma sorprendente el uso de taller con el de vivienda, característica diferenciadora del Patrimonio Industrial de Eibar.

 

Podríamos decir que el edificio completo está construido superponiendo dos bloques de viviendas sobre un edificio industrial. Tiene forma de “H” en planta con dos patios en los laterales, y su sección se adapta al terreno.

 

El propio arquitecto describe así su proyecto: “la superficie en planta completa es de 582 metros cuadrados; el declive del terreno obliga a ir disminuyendo esta superficie en las plantas bajas. La construcción forma unidad hasta la planta 4; aquí se divide en dos partes separadas por una terraza descubierta de 14m de largo por 3 de ancho, que da su acceso a 4 viviendas en la parte que da a la calle y a 8 en la posterior. (…) Los talleres ocupan tres plantas, servidos también por una amplia escalera y un montacargas”.

 

La construcción del taller responde de manera fiel al proyecto original. Se trata de un volumen rotundo, con una fachada plana de 4 vanos, que exterioriza los usos interiores a través de las proporciones de los huecos y sus carpinterías. Si bien las primeras 4 plantas piso presentan grandes huecos apaisados con carpintería de entramado metálico para uso industrial, las dos últimas plantas presentan ventanas de menores proporciones para vivienda.

 

En la fachada existen diversas concesiones estilísticas del arquitecto. Es el caso de las molduras rectangulares situadas bajo los ventanales industriales, donde también se incluye una pieza romboidal en el centro. En la coronación del edificio aparece un balcón en voladizo con los extremos redondeados, cubierto por un entramado de viguetas de hormigón para parra. Asimismo, cabe destacar la forma elíptica que adoptan los pilares en fachada.

 

El edificio cuenta con dos núcleos de escalera diferenciados. Uno con montacargas para las 4 primeras plantas industriales, y otro núcleo de escaleras para las viviendas, sin ascensor. Este segundo núcleo de escaleras llega a una terraza que permite el acceso a los dos bloques de viviendas que están a cada lado. Esta terraza bien podría tratarse de un parque que estuviera a nivel de calle, siendo una solución curiosa.

 

Como diferencia respecto al proyecto original, debemos indicar que se coloca un ascensor exterior en el patio existente junto al núcleo de escaleras para dar acceso a la terraza superior. No se ha localizado archivo de obras al respecto, pero por su tipo constructivo, el ascensor se construyó prácticamente a la vez que el edificio.

 

En 1973 se acometen unas pequeñas obras de levante en el patio este del edificio, ampliando los locales industriales de esta zona, tal y como podemos apreciar en el archivo de obras de 1973 6980.02.

 

Finalmente, en el año 2000 se realizan obras para el cambio de uso de las plantas industriales 3ª y 4ª en viviendas, proyecto redactado por los arquitectos Fernando Garate y Agustín Oteiza. La actividad industrial de pequeños talleres había decaído notablemente, y presumiblemente estas plantas no estaban explotadas. Las obras de remodelación no influyen en la volumetría exterior del edificio, pero sí se realizan obras interiores y se altera la fachada:

  • Se modifica el recorrido de la escalera en planta baja. El montacargas industrial original se utilizará como ascensor.

  • Se redistribuyen las dos plantas industriales, adecuando 8 viviendas en cada planta. El acceso a cada vivienda se realiza por un pasillo interior que distribuye los accesos.

  • La fachada se reconstruye, incorporando aislamiento térmico y sustituyendo los grandes ventanales industriales por huecos de carpintería adecuados al uso de viviendas.

Del mismo modo, la planta baja y primera se transforman en tienda y servicio de reparación para bicicletas, modificando también la carpintería original del edificio.

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