Edificio industrial en Gisastubide 1 y 3

Edificio industrial, 1948 (Raimundo Alberdi Abaunz )
Gisastubide 1-3

Descripción

En esta ubicación existió un taller construido en 1918 por la empresa  contratista Martín Errasti y Cía. En 1948 pasó a manos de El Casco, que fue quien promovió la reforma del edificio, donde se instalaron diferentes talleres por plantas que se comunicablan por una escalera y un montacargas común. Pese a ser más humilde que otros ejemplos de este estudio y encontrarse en mal estado, ofrece una imagen exterior atractiva y la curvatura apuntada del chaflán ofrece una imagen icónica de la construcción.

 

Aérea

Plano

Fotografías

Fotos históricas

Síntesis documental

En esta ubicación existió un taller construido en 1918 por la empresa contratista Martín Errasti y Cía. Era una pequeña construcción de estructura de madera con planta baja y una planta piso, ubicado junto al camino de subida al caserío Gisastu C5.32.31.

En 1925 se construyó un minúsculo anexo destinado a almacén en el espacio que existía entre el taller y el camino, con forma trapezoidal y de una sola planta. La construcción fue ejecutada nuevamente por los contratistas Martín Errasti y Cía, y en este caso se constata que el taller estaba ocupado por "Languille Alkartuak" C5.34.41.

Posteriormente, se realizaron dos ampliaciones adosadas al taller primigenio, prolongando el edificio camino arriba. No se han localizado los expedientes de obras que los describen, pero son claramente reconocibles en fotografías antiguas.

La primera fue un anexo de estructura de madera que ampliaba el taller en aproximadamente 5m, que constaba de planta baja y dos plantas piso. Pese a que no existe el expediente de obras, su tipo constructivo nos indica que fue construido antes de la guerra civil.

La segunda ampliación, en cambio, pese a que tampoco se haya encontrado documentación, fue construida posiblemente tras la guerra, ya que sus rasgos constructivos corresponden a una tipología habitual en este periodo: estructura de hormigón armado, fachada lisa con amplios huecos, y coronación con cubierta plana con alero. Constaba de 3 plantas piso, sin planta baja, ya que debido a la pendiente del camino, ésta desaparecía.

Cabe destacar que en esta época, el taller pasó a manos de la empresa Olave Solozabal y Cía. (El Casco), que cedía o alquilaba los locales a industriales que trabajaban principalmente para ellos. De hecho, estos propietarios promovieron la reforma del edificio en 1948, sustituyendo las partes construidas con estructura de madera por una nueva construcción de hormigón armado 6867.48.

Se derribaron las partes de estructura de madera, y aprovechando los muros de contención de mampostería, se construyó un nuevo edificio que quedaría adosado a la parte de hormigón armado pre-existente que no fue derribada.

El proyecto y dirección de obra corrieron a cargo de Raimundo Alberdi, que diseñó  un taller que ocupaba exactamente el mismo perímetro que el taller original, ubicando la caja de escalera y el montacargas como un volumen adosado en el reducido espacio que pertenecía al almacén anexo de 1925.

Sin embargo, durante el proceso de construcción se modificó el proyecto original. Se amplió el perímetro exterior del taller hasta el camino, y se transformó en un chaflán curvo la esquina del edificio más visible desde la vía pública, recurso habitual de este arquitecto.

El resultado de esta ampliación fue un edificio de planta baja más cuatro plantas piso que unificaba la parte pre-existente con esta nueva ejecución, en el que se distribuían diferentes talleres por plantas comunicados por una escalera y montacargas común.

Desde entonces el edificio no ha sufrido modificaciones. Actualmente está en estado de semi-abandono, aunque está parcialmente en uso por empresas que ocupan algunos locales.

 

 

Signaturas

Ficha técnica

Estilo

Es un edificio que al exterior se lee como un bloque único, aunque en realidad es el resultado de una evolución constructiva que actualmente diferencia dos fases.

En 1948, el proyecto de Raimundo Alberdi toma como referencia la parte pre-existente de hormigón armado, y prolonga su construcción. El diseño original dista enormemente de la realidad construida, que es aún más interesante. 

Se aumenta la envolvente del taller y se lleva al límite de parcela, que queda adosado al camino. En la esquina, el arquitecto introduce un chaflán curvo, recurso habitual de los proyectos de Alberdi, con la singularidad de que su doblez es especialmente pronunciada.

Respecto al orden compositivo, no es especialmente destacable, aunque la fachada de la ampliación es mucho más sensible que la parte pre-existente, con un ritmo regular.

El aspecto más notable es el tratamiento de los huecos de carpintería curvos sobre el chaflán, que en lugar de responder a un eje de simetría, parecen que hayan sido plegados siguiendo las dimensiones de los ventanales del resto de la fachada.


Singularidades

Pese a ser más humilde que otros ejemplos de este estudio, y encontrarse en mal estado, ofrece una imagen exterior atractiva. Se disimula que haya sido construido en dos fases, y la curvatura apuntada del chaflán ofrece una imagen icónica de la construcción.

Este pliegue de fachada quedaría dirigido hacia la entrada de tráfico rodado de la fábrica de Cadenas Iris [IP-01]. Las visuales que se producen uniendo este taller con la esquina redondeada de la parte interior de la fábrica de Cadenas Iris, son propias del paisaje industrial eibarrés, que serían espectaculares en los tiempos de pleno funcionamiento industrial.


Tamaño:
1545/503
Tipología:
Alokairuko tailerrak
Tamaño:
Ertaina
Evolución:
Handitzeak
Topografía:
Aldapa gogorra
Relación con el río:
Sin afección
Nº plantas piso:
5
Nº plantas sótano:
0
Estructura:
Hormigón armado,
Cubierta:
Ur-estalkia,
Carpintería:
Celosía metálica,
Afección del planeamiento:
Sin afección
Grado de utilización:
Ez da asko erabiltzen

Mapa