Modesto Urquiola
- Edificio industrial, 1952
(Diego de Basterra,
Felipe Anitua
)
Txonta 18
Descripción
El industrial Modesto Urquiola Telleria construyó su taller en 1949 en Txonta para su uso como garaje y taller mecánico. En los años 70 el edificio pasó a manos de la empresa vecina "Ochandiano y Echeverria". Actualmente el edificio está en desuso.
Síntesis documental
Modesto Urquiola Telleria fue un industrial que en 1949 construyó su propio taller en Txonta. Así se desprende de la solicitud que realizó en noviembre de ese año para la construcción de un pequeño garaje y taller mecánico en este emplazamiento 6868.95.
Constaba de una sola planta que se abría mediante un gran portón al camino de Txonta. En un lateral se adosaba a las forjas de Odriozola y Echeverria, mientras que en la parte posterior quedaba contra la ladera. Se construyó en hormigón armado y quedaba rematada con cubierta plana para permitir futuras ampliaciones.
Precisamente, en octubre de 1951, este industrial solicitó la elevación de dos plantas sobre el garaje siguiendo el proyecto de Diego de Basterra. Se habilitó una escalera junto a la medianera para comunicar las tres plantas, y se construyeron unos servicios higiénicos adosados al taller en la parte trasera, permitiendo así espacios diáfanos de trabajo.
Modesto Urquiola desarrolló aquí su actividad como taller mecánico y fabricación de cortaúñas (según matrícula industrial de 1964) como mínimo hasta finales de los 60.
De hecho, en 1966 presentó una solicitud para ampliar dos plantas más su pabellón, siguiendo el proyecto de Diego de Basterra. El proyecto consistía en añadir dos plantas más con idéntica distribución y fachada sobre el edificio existente, hasta tener planta baja más 4 plantas piso 7036.04.
Sin embargo, pese a que la solicitud fuera aceptada por no contradecir la normativa urbanística, la ejecución no llegó a llevarse a cabo.
En los 70, el edificio pasó a manos de la empresa Ochandiano y Echeverria, ubicada en el taller contiguo. Así se demuestra en la instancia de enero de 1973 presentada por José Ochandiano Alberdi, en representación de esta empresa, solicitando la ampliación y reforma del edificio 6979.12.
Siguiendo el proyecto del arquitecto Eduardo Artamendi, se amplió la planta baja para destinarla a forja, mientras que en planta primera se situarían las oficinas y en la planta segunda el archivo. También se realizó una reforma de la fachada, donde las carpinterías fueron renovadas.
Actualmente el edificio se encuentra en desuso. Se proyecta una reestructuración de todo el barrio donde posiblemente desaparecerán la mayoría de los edificios industriales, siendo este uno de ellos.